Bagnoli (Italia), 13 mar (EFE).- Entre intervenciones de los bomberos para revisar desperfectos en casas, las fachadas y las escuelas, los vecinos de Bagnoli, uno de los municipios más afectados del seísmo de magnitud 4,4 que afectó esta madrugada la periferia de Nápoles (sur de Italia), muestran su preocupación por el temor a nuevas réplicas. “La sacudida fue terrible”, explica a EFE María, mientras le cuenta a una vecina que el temblor, uno de los mayores de los últimos años, le pilló en su casa junto a su familia, y aunque su apartamento no sufrió daños, duda si permanecer esta noche en casa o buscar otro sitio en caso de que haya más réplicas parecidas al fuerte seísmo. IMÁGENES: JOAN MAS AUTONELL. RECURSOS DE LA CIUDAD DE BAGNOLI, SUR DE ITALIA, TRAS EL SEÍSMO.